¡Hola amigos! Hoy platicaremos de uno de los pilotos más talentosos que la historia del automovilismo mundial haya dado, un piloto con un talento fuera de serie, joven, precoz, rápido, osado y... orgullosamente mexicano, RICARDO RODRÍGUEZ DE LA VEGA al cual recordaremos respetuosamente tanto por el regreso de la Fórmula 1 a nuestro país en el Autódromo que lleva su ilustre apellido (así como el de su hermano , otro gran piloto, el inolvidable Pedro) como por la fecha de su aniversario luctuoso No. 53, que casualmente, es la misma fecha en que se celebró exitosamente el Gran Premio de México de 2015.
Lamentablemente el cielo lo llamó muy rápido, sólo pudo disputar cinco Grandes Premios, pero aún así, en tan poco tiempo pudo demostrar de lo que era capaz al volante y logró llegar a lo más profundo del corazón de los aficionados en todo el mundo y desde luego en su amado México.
Ricardo empezó siendo un niño en el deporte, eligiendo el motociclismo, esperando tener la estatura necesaria para poder manejar algún auto, una vez logrado lo anterior se enrola en las categorías más importantes de nuestro país, obviamente quedándole chicas consiguiendo campeonatos rápidamente y sí, a los quince años de edad participó en su ¡primera carrera internacional! (muere de envidia Max) en el Autódromo de Riverside, California el año de 1957, compitió en el automovilismo de resistencia en el cual adquirió una gran experiencia corriendo en las principales carreras a nivel mundial de esta especialidad, sufriendo su primer gran decepción cuando los organizadores de las 24 horas de Le Mans no le dejan participar en la carrera, ya que nuestro querido piloto, que, aunque daba los tiempos sin ningún problema ¡tenia solo dieciséis añitos de edad! wow.
Fue muy satisfactorio que la afamada revista deportiva Sport Illustrated le dedicara una portada en su revista y en el articulo destinado a Ricardo citara "México manda a un niño a Sebring" haciendo alusión a la juventud del volante mexicano y a la importancia de la prueba que disputó (después de esto pasaron dos décadas para que otro deportista mexicano apareciera en la portada de esta revista y fue el Toro Fernando Valenzuela a principios de los 80´s).
Para 1959 continuó compitiendo en el campeonato mundial de resistencia con gran éxito y por supuesto, regreso a la cita que tenia pendiente con Le Mans, esta ocasión si le permitieron correr y junto con su hermano Pedro corrieron de forma espectacular al grado de liderar la prueba por un gran periodo de tiempo estando a punto de ganarla, pero a falta de menos de dos horas para terminar, el auto sufre una descompostura y los deja a un paso de lograr la gran hazaña.
Le Mans le debía una y estuvo de regreso en 1960 realizando una gran carrera estableciendo los tiempos mas rápidos tanto en lluvia como de noche y logró la gran proeza de terminar la carrera en segundo lugar general, convirtiéndose en el ganador de un podio más joven en la historia de esta prueba con solamente 18 años y 133 días ¡impresionante nuestro piloto! Los ojos del mundo estaban sobre él, Ricardo poseía ese estilo de conducción que le encantaba a Don Enzo Ferrari y encajaba perfectamente en la filosofía de su equipo de carreras, Ricardo tenía ¡ FUEGO EN LA SANGRE!
Ferrari no lo iba dejar escapar e inmediatamente se pone en contacto con él y lo invita a ser parte de la Scuderia, debutando de forma oficial en el Gran Premio de Italia disputado en el veloz circuito de Monza, Ricardo por su parte hace su trabajo y deja a todos con la boca abierta al calificar en segundo lugar solo detrás de Wolfgang Von Trips y delante de los encumbrados pilotos de su época como: Phil Hill, Richie Ghinter, Dan Gurney, Bruce McLaren, Graham Hill, Lorenzo Bandini, Sir Stirling Moss, etc. etc.
El 10 de septiembre de 1961 marca el debut de Ricardo en Fórmula 1 a los 19 años y 208 días, récord que permaneció inamovible durante ¡48 años! hasta la llegada del español Jaime Alguersuari en 2009 quien debuto a los 19 años y 125 días, récord que a sido destrozado ahora por Max Verstappen al debutar con 17 años y 164 días.
La carrera fue trepidante, Ricardo se alternó la punta infinidad de ocasiones con sus muy experimentados rivales, Ghinter y Hill abandonando la carrera cuando estaba ganando por un inoportuno fallo en la bomba de combustible de su auto, la demostración quedó en el recuerdo de los aficionados en todo el mundo quienes desde ya lo reconocían como la futura estrella de Fórmula 1.
Para 1962 disputó cuatro Grandes Premios iniciando en Holanda donde califica en onceavo, remonta espectacularmente pero tiene que abandonar por un accidente a siete vueltas de terminar clasificándose en el décimo puesto. No es convocado para Mónaco y su siguiente carrera es en Bélgica, en el veloz, largo e intimidante circuito viejo de Spa Francorchamps que tenía 14.1 kms. de longitud, impresionante circuito.
Ricardo no se intimido e hizo una de sus mejores actuaciones convirtiéndose en el primer mexicano en puntuar oficialmente en Fórmula 1 al terminar en el cuarto lugar a solo ¡una décima! de su compañero de equipo en Ferrari, Phil Hill que termino tercero y poder subir al podio de triunfadores ¡imaginen!
De igual manera no es convocado para Francia e Inglaterra siendo su siguiente carrera en Alemania, en otro circuito clásico y legendario, por su longitud y peligrosidad, el temido infierno verde de Nurburgring, con una distancia tremenda de más de 22 kms. de recorrido que, para un novato el poder descubrir sus secretos y/o simplemente aprenderlo y memorizarlo es muy complicado, pero no para Ricardo, que con ese desbordante talento lo dominó inmediatamente calificando décimo y remontando hasta el sexto sitio para, una vez más puntuar en una carrera de Fórmula 1.
Su siguiente cita es en Monza en el Gran Premio de Italia donde no tiene mucha fortuna, califica onceavo y se retira por problemas eléctricos en su auto después de 63 giros. Para principios de noviembre había una carrera de invitación de Fórmula 1 en México, es decir no puntuable y Ricardo estaba impaciente de correr en su país, pero oh sorpresa, Ferrari decide no venir a correr aquí, Ricardo se mueve y solicita el permiso a los altos mandos de la Scuderia para competir con otro equipo, ya que no quería perderse la cita en su país, lo cual Ferrari acepta y Ricardo esta listo para correr en México, ante su público, con el equipo privado de Rob Walker en un Lotus-Climax.
Iniciaba el primer día de pruebas y Ricardo salió a comerse la pista, feroz como era devoraba el asfalto del Autódromo imponiendo récord a cada vuelta, cada vez más rápido, hasta que decide que por ese día era suficiente ya que había establecido un registro difícil de igualar, pero no fue así, John Surtees le baja el tiempo por dos décimas, Ricardo ya vestido "de civil" listo para ir a una reunión, al enterarse de lo anterior se viste de piloto nuevamente y regresa a la pista, se despide de Pedro y le comenta "ahorita regreso".
El Lotus va volando en la pista, al pasar en la recta frente a su pit hace la típica señal de que todo esta "ok" pero... ya no regresó mas. Ese modelo de auto en particular tenía un error de diseño y con mucha facilidad se iba "de cola", en una curva como la peraltada se necesita mucha estabilidad para tomarla a fondo... cosa que hizo Ricardo, a una velocidad superior a la que su auto le permitiría Ricardo dobla a la derecha y el auto patina ligeramente de atrás, Ricardo corrige pero el auto no apunta a donde el piloto le ordena y se produce la tragedia, el choque fue brutal, golpea fuertemente contra los rieles de contención exteriores en la parte alta de la veloz curva peraltada, el auto se destruye por completo y Ricardo sale disparado de este, golpeando con la cabeza los postes que detienen los citados rieles falleciendo instantáneamente mientras los restos del auto rebotan y golpeaban por todos lados dada la altísima velocidad a la que iba.
Ya fallecido, se lo llevan en ambulancia al hospital de urgencias de Balbuena con la esperanza de revivirlo, los esfuerzos fueron en vano y se da la terrible noticia que conmocionó a México y el mundo entero: SE MATA RICARDO RODRIGUEZ EN LA CURVA PERALTADA DEL AUTÓDROMO a los veinte años de edad, oficialmente fallece a las 17:08 hrs. del 1° de noviembre de 1962, el benjamín de la Fórmula 1, el piloto que le dio sus primeros puntos a México en Fórmula 1, la futura estrella del mundo nos a dejado... ¿Cuál sería su destino? ¿Hasta dónde hubiera llegado? ¿Sería campeón del mundo? solo Dios sabe, su talento, velocidad y arrojo, eran elementos suficientes para, llegado el tiempo en que la calma y la madures llegaran a él, pudiera convertirse en un grande de la categoría, el preferido de la afición en el mundo y como nos preguntábamos con anterioridad, tal ves, efectivamente, en campeón mundial.
Una gran cantidad de personalidades le lloraron alrededor del mundo, compañeros pilotos, público en general, su hermano, su familia, el mismo Don Enzo Ferrari (que incluso otorgo una indemnización económica a la viuda del piloto) e inclusive, el Sr. presidente de la república (quien era amigo personal de su padre) Don Adolfo López Mateos, quien era un amante del automovilismo y gracias a la amistad que tenia con Don Pedro Rodríguez surge y después se concreta, la idea de la construcción del Autódromo de la Magdalena Mixhuca que, orgullosamente, en la actualidad lleva el ilustre apellido de dos de nuestras máximas leyendas del deporte motor mexicano.
Hoy día, afortunadamente en muchos lugares del mundo se recuerda respetuosamente el aniversario luctuoso de nuestro gran piloto, que en un periodo muy corto de tiempo, demostró al mundo la clase de piloto que era y su impresionante talento, que lo llevo a ganarse el corazón de los aficionados de todo el mundo que lo recuerdan con cariño y respeto igual que aquí, en México, donde siempre que visitamos nuestro templo de la velocidad veremos el busto de Ricardo y Pedro que nos dieron los mejores pasajes en la historia de nuestro bello deporte.
Ricardo, nunca te olvidaremos.
¡HASTA LA PRÓXIMA!