Las actividades de NASCAR culminaron hace muy poco tiempo y es normal que ya la extrañemos, pero todavía tenemos para repasar la gran temporada que en este caso nos dio la NASCAR Camping World Truck Series.
Para este año adoptaron el sistema de "chase" de la Sprint Cup, que dio una emoción muy grande en la definición en Homestead que consagró a Johnny Sauter como campeón en su primer año con la Chevrolet #21 de GMS Racing. Luego de siete temporadas en ThorSport Racing el experimentado piloto decidió cambiar de aires para conseguir su primera corona en una serie de NASCAR, mundo el cual está involucrado desde el 2001 corriendo para Richard Childress, pasando por las tres series nacionales.
Fotografía: Getty Images |
Sauter ganó la fecha inaugural y no fue hasta Martinsville y Texas que volvió a "victory lane" para asegurarse un lugar en Miami, donde fue tercero y el mejor de los "chasers", suficiente para coronarse por primera vez tanto el como su equipo.
Matt Crafton fue el sub-campeón de este año, dejando un sabor amargo para él y su equipo naturalmente por la decepción de no ganar, sino porque fueron derrotados por un ex piloto de esa estructura. Crafton en 2017 buscará su tercera corona en la serie.
En tercer lugar terminó Christopher Bell a bordo de la Toyota #4 que había logrado el título el año anterior. No tuvo un año sencillo por su falta de experiencia pero logró enderezar un inicio muy fulero para terminar en la final, donde no tuvo la mejor camioneta pero batalló hasta el último momento y se lleva como premio consuelo el "novato del año"
El gran invitado a la final fue Timothy Peters debido a que el gran favorito al título William Byron sufrió una falla mecánica en Phoenix mientras lideraba, quedando fuera de carrera y eliminado de toda posibilidad de ganar el título en su primer año. Que casualidad que Byron logró su séptima victoria en la última carrera, y estaríamos hablando de otro piloto coronado campeón pero la realidad es que Peters fue finalista, pero no tuvo una destacada actuación en el cierre siendo el peor de estos.
La Toyota #9 manejada por Byron, del equipo de Kyle Busch fue la campeona del campeonato de propietarios, al igual que la marca nipona en el campeonato de marcas.
Cuatro pilotos lograron su primer gane en esta temporada, es el caso de Byron en Kansas, Ben Kennedy en Bristol, Brett Moffitt en Michigan y Daniel Suarez en Phoenix.
También cuatro chicas tuvieron presentes en el año, el caso de Jennifer Jo Cobb que no compitió en todas las carreras pero si marcó presencia como dueña de equipo en ocasiones donde cedió su butaca a varios pilotos incluida Claire Decker que corrió dos veces este año para JJC Racing, siendo una con su hermana Paige en Martinsville, que para esa ocasión intentó correr su prima Natalie pero no logró clasificar.
La canadiense Dominique Van Wieringen que tuvo muy buenas carreras en la K&N East series debutó en Phoneix donde estaba haciendo muy bien las cosas hasta que la chocaron debió retirarse. Ella es una de las chicas que tienen un futuro prometedor en NASCAR.
Ahora solo nos queda esperar anuncios de pilotos y equipos en la temporada baja para volver a ver a estas preciosas camionetas en pista en Daytona, a fines de febrero del año entrante.
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