Las carreras no se ganan hasta que cae la bandera a cuadros. Es una de las frases mas usadas del deporte motor y eso fue lo que demostró Sebastian Vettel en Melbourne.
Después de la vuelta supersonica de Hamilton el día sábado todo hacia suponer que el británico pasearía de la primera a la última vuelta del GP australiano pero no fue así.
La largada fue tranquila sin toques ni maniobras peligrosas siendo Max Verstappen quien quedo mas relegado con unos sorprendentes Haas que luego se convertirían en la decepción del día con un doble abandono.
La definición de la carrera estuvo en boxes. Ferrari fue el primero en reaccionar llamado a kimi en la vuelta 19 mientras marchaba en segunda posición cambiando ultra softs por softs. Inmediatamente Mercedes repetiría con Hamilton. Vettel se quedó en pista más tiempo tratando de estirar la ventaja de un Hamilton que le sacaba lo mejor a sus compuestos frescos.
La clave: El doble abandono de Haas inmmediato a su salida de boxes por problemas de la pistola neumatica causo la salida del safety car virtual para intentar retirar el coche de Magnussen lo que le dió a los pilotos que no se habían detenido a hacerlo sin perder mayor tiempo por el limite de velocidad. Entre ellos estaba quien lideraba la competencia, Vettel.
Al perder la posición con Vettel, Hamilton preguntaba por radio donde había estado el error ya que los de Mercedes no calculaban a Vettel por delante bajo ninguna situación. Los cuadruple campeones intercambiaron records de vuelta y más allá de el esfuerzo de Lewis, nunca pudo encontrar en el hueco
El piloto del día: Fernando Alonso con un quinto puesto de Mc!aren en un auspicioso comienzo de año para el equipo completo con el noveno puesto de Vandoorne
Force India termino fuera de los puntos con Pperez y Ocon 11 y 12 respectivamente.
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